La marca peruana de sánguches de origen criollo del Perú, LA LUCHA, en las últimas semanas ha subido de forma escalonada la cortina de su primera sucursal en México, para ofrecer al público de Polanco y de la CDMX las delicias de la gastronomía andina, inauguró su primera sucursal en México.
LA LUCHA, Sanguchería Criolla es una propuesta gastronómica ampliamente conocida en Perú, Colombia y Chile, y que ahora el público mexicano podrá conocer esta experiencia única: sánguches de la más alta calidad, elaborados con insumos artesanales, a la vista del público, preservando las recetas tradicionales y el inigualable sabor peruano: se preparan y hornean las carnes de cerdo y los panes andinos con ingredientes traídos directamente de ésta zona.
Similares a las tortas mexicanas, para los peruanos saborear los sánguches tradicionales los ayuda a evocar los sabores de su tierra natal, en cada bocado se sienten en su país.
La Lucha fue instituida como cadena restaurantera hace casi 15 años por el ingeniero y contador César Taboada en el distrito limeño de Miraflores, y es el rostro risueño que inspiró al logotipo de este peruvian urban food.
Grupos de expertos en Gastronomía, peruanos distinguidos y público mexicano han degustaron los sánguches de lomo con doble queso y cebolla caramelizada, lechón horneado hasta casi derretirse, congelado para recuperar firmeza y asado a la plancha en su propio jugo, y chicharrón con camote frito, así como los de la receta “de la abuela”, cocinados por 14 horas con el inigualable sazón de las especies del Perú, así como los del delicioso pollo deshebrado.
La sazón de la salsa criolla, las papas fritas y el pan son otros de los secretos del éxito de la franquicia. Los socios explican que, para el pan francés al estilo peruano, los trajeron a un maestro bizcochero que enseñó a preparar la masa un día antes para dejarla reposar 18 horas para hornearla en hornos especiales dentro del mismo local.
La explicación detallada del proceso de cocción de cada platillo, así como las características de los panes horneados en el mismo local y las papas que acompañan a los sánguches, fue expuesta por uno de los empresarios que trajo a México esta propuesta gastronómica, Jonathan Guerrero, quien invitó al reto de satisfacer los exigentes gustos del público mexicano.
Por su parte, Joanna Ramos, Directora de Comunicación de LA LUCHA en México, resaltó que la llegada de esta propuesta gastronómica a México representa una emocionante expansión internacional que busca brindar a los mexicanos una experiencia gastronómica única.
Fue en el local de Emilio Castelar #111 local F, casi esquina con Oscar Wilde, a unos pasos del parque Lincoln, donde el Ministro Carlos Jesús Rossi Covarrubias, Cónsul General del Perú en la Ciudad de México y otros invitados especiales, miembros de la comunidad de del Perú en México y reconocidos influencers, declararon formalmente inauguradas las instalaciones de LA LUCHA, Sanguchería Criolla en México, con el mismo estándar de cocina e infraestructura, así como de personalizada atención a todos sus clientes.
Finalmente, Andrés Ramírez Mendizábal, otro de los socios que trajo a México este emprendimiento, explicó las tradicionales bebidas que ofrece la carta de La Lucha: aguas frescas de Chicha (maíz morado agridulce) y Horchata (intensa de sabor y más espesa que la mexicana), además de la Inca Kola (elaborada con base en goma, lúcuma y piña) y la emblemática cerveza Cusqueña.