No hace ni un mes que los diarios de todo el mundo reportara la caída que, como negocio, está teniendo la televisión de paga, que ahora, ante el streaming, resulta aburrida y cara. Aquí mismo, en la CDMX, el curador de Cablevisión ha demostrado ser un vago de lo peor, instalado en su confort, que repite la programación hasta el cansancio mientras su área administrativa cobra a los usuarios las perlas de la virgen.
Así no costea: sale mucho mejor contratar a Netflix, Disney, Amazon u otras, que estar pagando algo en donde ya no hay nada que ver. Y por favor, que no nos vengan a decir que VIX ahí la lleva: es el pan con lo mismo con el ingrediente agregado de la absoluta falta de creatividad que tienen los productores de Televisa.
Así las cosas, trascendió que durante la reunión de inversionistas realizada a finales de octubre, Alfonso de Angoitia, (tenía que ser de los 4 fantásticos), co-presidente de Televisa, informó que la empresa cuyas acciones están en la lona, le va a meter más recursos y más ganas a SKY y a VIX a pesar de que el panorama, para estas dos marcas pinta más negro que un huracán en Acapulco.