Este año, entre quienes participaron en el certamen de los Leones de Cannes 2024 hubo una agencia mexicana cuyo nombre no voy a decir para evitarme problemas. Lo cierto es que dicha agencia envió a concurso una campaña que, después de haberse transmitido y con las cifras claras, logró para esa marca ventas por un billón de dólares. Leíste bien, querido lector: fue así, con “b”, por un billón de dólares.
Las ideas, de los creativos mexicanos, sirven ahora para vender más que PEMEX. Pero eso a los dueños de los Leones de Cannes les vale madres y les tiene sin cuidado. Simplemente no lo entienden
Tengo entendido que, de entre las más de 50 participaciones que México inscribió en ese concurso de este año, hubo varias estatuillas: convendría que nos dijeran con qué criterios se otorgaron. Porque, si nos atenemos al principio de que la publicidad debe hacerse para vender, están equivocados. Eso, o de plano están fuera de la realidad.
Ya no son los Leones: son los Truchos de Cannes.